Desde su enfrentamiento con Milos Raonic en las semifinales de Wimbledon, Roger Federer no volvió a competir. El suizo sigue recuperándose de una lesión de su rodilla izquierda, la cual no le permitió jugar regularmente en el circuito en el 2016.
"Es raro estar aquí en Suiza y no en el US Open, indicó el helvético ante medios europeos. Es una sensación que no sentía desde hace años. He jugado allí desde el 90, desde que era junior, siento que algo me falta. Por supuesto que duele, me gustaría jugar en la Arthur Ashe y escuchar a la gente, estar en la ciudad, competir con todos los jugadores. Duele pero estoy bien, con salud y disfrutando con la familia. Chequeo los resultados para ver lo que ocurre, estoy muy impresionado por todas las veces que lo hago. Me interesa saber qué pasa".
Al hablar sobre su rutina actual, Roger contó: "Me siento como un trabajador a tiempo parcial. Me entreno por las mañanas y luego almuerzo con mi familia. Luego disfruto de tiempo libre por las tardes. Paseo, me encuentro con amigos, voy a esquiar, disfruto de Suiza con una programación menos cargada de lo habitual".
"Ayer me encontré con Ivan Ljubicic (su entrenador) y el doctor y programamos lo que haré los próximos meses, tanto para los entrenamientos como para la programación en general. No deberían volver a haber recaídas", precisó el ganadaor de 17 Grand Slam, quién agregó: "Comenzaré la nueva temporada jugando la Copa Hopman, luego el Open de Australia, Dubai y después Indian Wells y Miami".
"No fue una decisión fácil, pero no tenía otra opción. La salud es una prioridad para mí y estaba claro que no podía jugar en Rio y los Estados Unidos. No estaba dispuesto a correr el riesgo de jugar tomando analgésicos", confiesa el suizo. "Está claro que duele, pero por otra parte, la alegría del retorno será mayor", puntualizó Federer, quién ya piensa en su retorno.
Por Javier Panzardo | Twitter: @Javier_Panzardo
No hay comentarios:
Publicar un comentario