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| Los jugadores de Independiente celebrando en Japón |
El Rojo en la primera mitad controló el partido, tuvo el dominio de la pelota, mientras que el equipo japonés se replegó en defensa y resistió hasta el minuto 28, cuando Maximiliano Meza filtró un pase al área, la pelota quedó en poder de Silvio Romero tras rebotar en dos jugadores del Cerezo Osaka, el delantero eludió al arquero Kenta Tanno y definió de derecha para anotar el único gol del encuentro.
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| Silvio Romero festejando su gol ante Cerezo Osaka |
Luego el equipo de Avellaneda siguió controlando el partido, pero le faltó la puntada final para profundizar y definir, por lo que no pudo ampliar la diferencia en el marcador.
El equipo argentino mostró carácter, determinación y juego, ya en el segundo tiempo, sintió el cansancio, sumados a los factores como el calor, la humedad y el cambio de horario. Por otra parte el Cerezo Osaka mostró un juego más ofensivo, a tal punto que el arquero uruguayo Martín Campaña intervino muy bien en una jugada de riesgo para evitar que la pelota se colara en el arco luego de un desvió que se gestó en un corner ejecutado por el equipo asiático.
Independiente terminó imponiéndose en Osaka, conquistó la Suruga Bank lo que representa su tercer título ganado en Japón, las otras dos victorias en suelo japonés fueron en la Copa Intercontinental 1984 (1-0 ante Liverpool) y Recopa Sudamericana 1995 (1-0 ante Vélez). Es el trofeo Nº 18 en el plano internacional (son 20 si se cuentan las dos Copas Aldao de 1938 y 1939, torneos que avala la AFA pero no la CONMEBOL).
El Rey de Copas agigantó su mística y mantiene la llamarada copera bien encendida, gracias al trabajo de todo el equipo, la directiva y del entrenador Ariel Holan, que fue quién señaló el camino hacia la gloria.
Por Javier Panzardo | Twitter: @Javier_Panzardo
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