En 1991, Pavel inició jugando profesionalmente en el Fotbalový Klub Dukla Praga, club de República Checa. Allí jugó 19 partidos y marcó 3 goles. Sus buenos desempeños futbolísticos, lo llevaron a fichar por el Sparta Praga. Nedvěd siguió jugando en el fútbol checo, con los Železná Sparta, registró 117 partidos, 28 goles y cuatro títulos: Primera División de Checoslovaquia, dos Gambrinus Liga y una Copa de la República Checa.
Su andar regular y eficiente, hizo que Pavel llegué a Italia para vestir la camiseta de la Lazio. El mediocampista checo siguió brillando, ya que consiguió siete títulos, al tiempo que jugó 207 partidos y anotó 51 goles con Los Blanquicelestes.
En la temporada 2001/2002, el Cañón Checo fue refuerzo estelar de la Juventus (el equipo de Turín acababa de vender a Zinedine Zidane al Real Madrid), el club italiano pagó 42 millones de euros por su pase. Con la Vecchia Signora, el mediocampista jugó 327 partidos, anotó 65 goles y conquistó cinco títulos: dos Ligas italianas, dos Supercopa de Italia y la Serie B en 2006/2007.
En 2006, junto a Gianluigi Buffon, Alessandro Del Piero, Giorgio Chiellini, Mauro Camoranesi, David Trezeguet, Pavel se quedó en la Juve cuando descendió a la Serie B de Italia en 2006, para luego ayudar a su equipo a ascender en la siguiente temporada. Ese particular hecho fue conocido como el escándalo de Calciopoli (supuestos amaños de partidos). En la actualidad, Pavel Nedvěd de 47 años, es el vicepresidente de la Juventus, un jugador y un equipo que conformaron una muy linda historia de amor futbolística y deportiva.
Por Javier Panzardo | Twitter: @Javier_Panzardo
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